¡No pases de las pasas! Una obra recupera la tradición mediterránea de este fruto

Esta Navidad te vas a hinchar a comer pasas, sí, lo sabes. Esas uvas arrugadas que te recuerdan a los pezones de tu tía cuando hace topless los días de frío. Ricas en fibra, ideales para cuidar de los resfriados, y «chuches» naturales, las pasas son parte de nuestro pasado y nuestro presente.

Carlos Fuster Montagud es el autor del libro ‘Los Riuraus: La Elaboración de La Pasa’ (Els Riuraus: l’elaboració de la Pansa), una obra que hace una retrospectiva del arte del cultivo de la uva en su variedad moscatel, cómo se prepara la pasa, la gastronomía propia de este alimento, así como el espacio arquitectónico que simboliza el valenciano riurau.

El riurau es una construcción típica de la comarca valenciana de La Marina Alta, eso está alrededor de Dénia por si no lo sabías. Al igual que los caseríos, las masías, o las barracas, el riurau se relacionaba con un tipo de producción concreta, en este caso la pasa de moscatel. Esta construcción es sencilla está orientada hacia el lado del sol y ofrece facilidades para la recolección, almacenamiento, secado, etc. del producto.

En la obra de Fuster Montagud se recoge un interesante material fotográfico, tanto antiguo como actual, que a través de las 170 páginas del libro ilustran esta agricultura valenciana injustamente poco reconocida pero de gran calidad y valor cultural.

Los «cromos» o «camisetas» eran los papeles con los que se envolvían las pasas para ser vendidas y, según afirma el autor: ‘son auténticas obras de arte decoradas con escenas costumbristas de considerable valor’.

Tanto desde un punto de vista cultural y de tradición mediterránea, artística y pedagógica en el mundo etnológico, la obra del autor recupera del cajón del olvido el mundo del cultivo de la pasa.