¿Qué pasó con Jordy cuando dejó de cantar ‘Dur Dur D’etre Bebe’?
El que fuera el cantante más joven del mundo, según el libro Guiness de los records, ya no es un bebé. Jordy y su Dur dur d’etre bebe sólo queda en la memoria de quienes lo padecieron en la década de los noventa pero… ¿qué ha sido de este hermoso bebé rubio?
La culpa es de los padres, que les ponen un micro en la boca y después cantan como almejas. En este caso Claude Lemoine, el padre de la criatura, lo vio clarinete. Su querubín tenía prensibilidad en las manos suficientes como para sujetar el micro y su madre la paciencia infinita como para exhibirlo en platós de televisión de medio mundo.
Claude es discógrafo y su esposa Patricia es compositora, a pesar de eso cuando su hijo no había cumplido aún ni la edad legal para atarse los zapatos decidieron sacar un disco. Lo que empezó siendo una coña entre familiares trascendió y se convirtió en el bebé del chupete de oro.
No les fue nada mal a estos inversores en bolsa (amniótica) pues el primer álbum de su hijo, el que contenía el hit inicial, consiguió más de 6 millones de copias (de la época). Posteriormente sacaron un segundo álbum, de menor éxito, y un tercero que tuvo menos éxito que Espinete en un cuarto oscuro.
Los que compraron un castillo para vivir, montaron un parque de atracciones en torno a la figura de su hijo, y se alzaron en medio de una polémica sobre explotación laboral infantil, acabaron arruinándose por completo. Su hijo volvió a la escuela mientras ellos se divorciaban y, finalmente, permitieron que su hijo dejase de lamentarse por la difícil vida de ser un bebé para crecer como adulto.
Jordy Lemoine estudió danza e interpretación, montó su propio grupo de música y puso Calais de por medio para irse a vivir a Gran Bretaña.
Aunque en Francia tuvo su momento reality show, apareció en alguna serie de bajo presupuesto, y trató de resistir con Jordy & the Dixies, pero con su estilo The Kinks o Sex Pistols parece que tuvo gatillazo.
Su actividad social en Internet no es que esté muy cuidada que digamos, e intuimos ser que el muchacho si bien no ha seguido cosechando fama y éxitos mediáticos, podría haber alcanzado la felicidad en su nueva vida anónima.
De sus padres no sabemos, pero la verdad es que nunca nos importaron a nadie. Sin el dinero de su trabajo infantil, pero con ganas de hacer proyectos, Jordy ya sabe qué dur dur d’ étre un adult
