Curso básico de fotografía. Paso 3: El diafragma
Pues en esta tercera entrega continuamos para bingo y del obturador pasamos al diafragma, otro de los elementos imprescindibles a la hora de controlar la luz y realizar fotografías.
Diafragma – Iris
Al igual que el obturador controla el tiempo que el sensor está expuesto a la luz, con el diafragma lo que conseguimos es regular la cantidad que pasa hasta éste. El diafragma o iris se encuentra situado en el objetivo de la cámara y está formado por una serie de cortinillas dispuestas en círculo y se abren o cierran cual «grifo» dejando que la luz llegue hasta el obturador a chorros o con cuentagotas. Cuanto mayor sea la apertura del diafragma, mayor cantidad de luz deja pasar y cuanto más cerrado esté, menos.
Lo del diafragma es un poco más complicado que el obturador ya que va a influir, y mucho, en el resultado final de la fotografía, pero no nos agobiemos y vayamos poco a poco. Ya veréis que merece la pena trabajarlo.
La apertura del diafragma se expresa en números f, así en minúscula, y el número con que lo expresamos es inversamente proporcional a la apertura del mismo. Esto en román-paladín es, cuanto mayor sea el número, menos cantidad de luz pasa, o sea, podríamos decir que la f lo que expresa realmente es el cierre más que la apertura. Más grande = más cerrado = menos luz; más pequeño = más abierto = más luz. Pero amigos esto no termina aquí, I am zorry, digo sorry. La luz se rige por las leyes de la física y la fotografía, pues eso, no es más que física.
Cuanto más abierto esté nuestro diafragma, mayor cantidad de luz dejará pasar pero a su vez mayor cantidad de desenfoque provocará. Por el contrario mientras más cerrado esté, menos cantidad de luz pasará y mayor será la zona enfocada. No se me agobien queridos, pasemos a unos ejemplos prácticos y así lo veréis más claro.
Aquí os presentamos a unos amigos que nos van a ayudar a entender mucho mejor esto del diafragma y de paso, refrescamos el obturador.
Como podéis ver en el cuadro superior derecho, para esta fotografía hemos utilizado una f muy pequeña, f:1,4 (mucha apertura). Esto provoca mucho desenfoque. En la fotografía tan solo está nítido nuestro personaje del centro (que es a quien estábamos enfocando) La escena tanto por delante como por detrás está fuera de foco.
En esta siguiente toma hemos cerrado el diafragma hasta f:4,0. Como podéis observar, nuestros personajes empiezan a dibujarse, aunque siguen estando desenfocados. Si os fijáis, en la imagen anterior, la obturación fue de 1/200 seg, en esta, para conseguir una luminosidad similar la obturación baja drásticamente hasta el 1/25 seg. Esto quiere decir, que si en lugar de nuestros amigos inmóviles, hubiésemos fotografiado personajes en movimiento, difícilmente los hubiésemos congelado.
En la siguiente toma volvemos a cerrar el diafragma hasta darle un valor de f: 8,0. Aquí nuestros amigos aparecen ya algo más nítidos y si nos volvemos a fijar en la obturación vemos que baja hasta un valor de 1/6 seg. Evidentemente, nuestra cámara estaba apoyada sobre el trípode para conseguir que la foto no salga movida o trepidada, que sería el término correcto a utilizar.
Nuevamente volvemos a cerrar nuestro diafragma hasta un valor de f:13 y como podéis observar nuestros amigos están prácticamente en foco. A cambio la obturación es de 0,4 seg para poder conseguir una exposición similar a las anteriores.
Y aquí la ultima de la serie. En esta ocasión hemos cerrado el diafragma hasta f:22, que en el caso de nuestro objetivo era el máximo. Los personajes están todos en foco y como podéis observar la obturación ha sido muy lenta, 1,3 seg. Ojo, esto no quiere decir que para cualquier foto necesitéis un diafragma de 22, eh?
Como con todo en la vida, esto del diafragma y los desenfoques es una cuestión de gustos, en la mayoría de los casos, aportando un estilo muy personal para algunos. Os recomiendo que paséis por la galería en Instagram de nuestra amiga Patri del Sol, a quién esto de los desenfoques se le ha ido de las manos!!
Al igual que para la obturación, para la APERTURA tenemos un modo dedicado en nuestra cámara, que en el caso de Canon es AV (aperture value), para Nikon y Sony es A (aperture). En esta ocasión nosotros vamos a controlar la apertura de nuestro diafragma y la cámara se encargará de determinar cual es la velocidad de obturación más adecuada para conseguir una exposición correcta.
Bien, pues hasta aquí podemos leer. Lo dicho, esto es un curso básico, hay muchas más cosas que decir y que hacer a cerca de la apertura o el diafragma, pero para empezar creemos que es más que suficiente. No queremos que nadie se nos atragante. Ya sabéis que cualquier duda, consulta, etc. será bien recibida, al igual que vuestros progresos.
Señoras, señores, cosas y demás fauna, ¡¡buena semana!!
- Curso básico de fotografía. Paso 4: La ISO - 2015/12/04
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